12/12/2025: ⭐⭐⭐⭐⭐ PAPRIKA – Cuesta de Abarqueros (Granada)
El lugar donde la comida vegana se convierte en fiesta y la gente en familia
Aquí no entras a un restaurante, entras directo a la casa de los cuatro mosqueteros más guapos y talentosos de Granada:
- Carlos, el capitán, chef estrella, alma gigante y juerguista oficial que te recibe como si fueras el hermano que vuelve de la guerra y te despide con dos besos y un “¡te quiero, cabrón!”.
- Jeros, el ninja silencioso de la cocina, rey absoluto de los rollitos vietnamitas con mango que deberían ser patrimonio de la humanidad. Ese hombre coge un mango y lo convierte en poesía crujiente. Te mira serio, te sirve el plato y se va… pero cinco segundos después ya está riéndose contigo de cualquier tontería.
- Madi, el cocinero que parece tímido y de repente te suelta un plato que te deja mudo. Precisión suiza, sabor explosivo y una sonrisa que se le escapa cuando le dices “joder Madi, ¿cómo haces esto?”. Es el que mantiene la calma cuando la cocina arde y Carlos y Jeros están en modo show, pero sin él nada sería lo mismo. Un crack total.
- Y luego está Nathanael, el camarero cubano que es puro sol con patas. Llega hablando en español, pasa al inglés, te suelta un “mon amour” en francés, un “bella” en italiano y te cuenta un chiste en alemán antes de que te des cuenta. Simpatiquísimo, rapidísimo, siempre con la broma perfecta y la recomendación exacta. Te acuerdas de tu nombre, de lo que pediste la última vez y de que tu perro se llama Loki. Trabaja como si le pagaran por hacer amigos, y lo consigue.
Con este cuarteto en escena, Paprika es una locura hermosa:
los rollitos de Jeros te hacen llorar de placer, los currys y croquetas de Carlos & Madi te vuelan la cabeza, y Nathanael te sirve el vino natural mientras te cuenta la última anécdota cubana que te deja doblado de risa.
El local vibra, la música suena, las mesas se juntan solas y de tanto hablarse y cuando te quieres dar cuenta han pasado tres horas, tienes la tripa feliz y cuatro amigos nuevos.
Conclusión:
Paprika no es un restaurante vegano.
Es el sitio donde Carlos, Jeros, Madi y Nathanael te recuerdan que la vida es demasiado bonita como para no comer rico, reír fuerte y abrazarse mucho.
Cinco estrellas saben a poco.
Esto es amor en forma de plato, mango y acento cubano.
Corred, pedid los rollitos de Jeros, dejad que Madi os sorprenda, que Nathanael os enamore y que Carlos os adopte.
Y cuando salgáis, mirad al cielo: seguro que está sonriendo igual que ellos.
¡Larga vida a este equipazo irrepetible! ❤️🌱🔥
12/11/2025: Un pequeño restaurante vegetariano (¿o incluso vegano?) con mucho encanto. Elegimos una mesa dentro porque las de la terraza están bastante inclinadas por la pendiente pronunciada 😅
La comida estaba deliciosa y a buen precio. El camarero fue amable y eficiente.
Recomiendo encarecidamente este lugar a vegetarianos y a cualquiera que busque un almuerzo saludable.