Fuimos en familia, nos gustó más las raciones y buena decisión. Pero el trato de Mario, ha sido de las mejores cosas q yo valoro cuando me siento a la mesa. Además comes en todo el centro de Merida.
Comimos un domingo al mediodía y nos ha parecido que estaba bastante bien el restaurante. Estuvimos en la terraza. Si que es verdad que no tenían de todo lo que aparece en la carta, pero las raciones son muy grandes y bien preparadas. Recomiendo, sobre todo, más croquetas caseras de morcilla.