Hotel Planamar en Castell-Platja d'Aro

Las habitaciones son muy bonitas ! Lo más importante a mencionar es el personal, siempre fueron todos muy atentos! Tienen un muy buen equipo

Muy buena experiencia, pequeño hotel ubicado al lado del paseo y la playa, alojamiento y desayuno , el desayuno completo, y variado,muy bien presentado y personal muy amable, comedor coqueto y muy cómodo, con excelentes vistas. La habitación de buen tamaño, bonita, cama muy cómoda, el armario algo pequeño para mí jeje, ducha espaciosa y funcionando perfecta, el baño bonito y moderno, zona de inodoro separada, muy bien también. Pequeña terraza muy agradable con vista lateral al mar. La zona es tranquila y sin ruidos, pero con un pequeño supermercado a unos segundos, el paseo con locales de hostelería variados. El restaurante del hotel donde se come fenomenal, y otro local a unos metros también donde comimos muy bien. En general comimos muy bien en todo el pueblo.Para repetir.

Todo es perfecto. Desde el desayuno gigantesco hasta la cena... La higiene es impecable. En recepción, Marc es adorable y habla un francés perfecto. Una ubicación frente al mar, ¿qué más se puede pedir?

El personal del hotel es muy simpático y atento, quedé encantada con el trato recibido. También destaco la limpieza, que realmente se nota y da mucha confianza al hospedarse aquí. Como crítica constructiva, en el restaurante los camareros parecen estar aún en proceso de aprendizaje; se nota que son muy jóvenes y les falta experiencia. Sin embargo, ponen buena disposición y seguro que con el tiempo mejorarán.

Nos ha gustado mucho la zona, el hotel muy agradable con buen desayuno, lo único las habitaciones un poco pequeñas, aunque la primera línea es ideal,

Genial lugar, gracias a Sergi por la profesionalidad.

Tuvimos una semana maravillosa: limpio, tranquilo, cómodo, con vistas al mar, un desayuno muy completo y mucho más. El personal fue muy atento y servicial con cada necesidad de los huéspedes, profesional y perfecto.

Emos estado cinco días en familia en una habitación cuádruple, super amplia, limpia y perfecta nos a sorprendido mucho , las instalaciones de diez y la atención del personal maravillosa 😃

El hotel se encuentra justo afuera de la entrada principal, en plena playa. Gire a la izquierda y camine dos cuadras hasta la animada zona comercial y gastronómica. La ubicación es excelente, muy cerca de todo. Nuestra habitación doble era excelente en general, con refrigerador, caja fuerte, armario, televisor y bolsa de agua caliente. También nos proporcionaron café y bolsitas de té, además de sombrillas y toallas de playa. Hay una piscina en el quinto piso y un salón de masajes en el sexto. Tenía todo lo necesario. El personal de recepción fue amable y atento.

Hotel frente a la playa con una ubicación ideal para ir a pie a todo. Habitación limpia, tranquila y espaciosa con ropa de cama cómoda. La única pega es el baño, que no es un baño, con un lavabo básico y una ducha que recuerda a la de un hotel de gama baja. La gran pega de la piscina y la azotea: agua turbia, espacio muy reducido, cierra a las 20:00 y nada acogedora: la vista está rodeada de edificios cercanos. Con niños saltando en el agua, es imposible disfrutar de la piscina. Desayuno buffet perfecto 👍 Precio un poco excesivo para una habitación con vistas al mar 🌊 265 € por noche, con desayuno incluido de 18 €, para una estancia del 23 al 24 de agosto.