Flanagan's en Ávila

06/01/2025: Hemos ido hoy día de Reyes mi familia y yo para celebrar mi cumpleaños. Mi mujer había intentado reservar los últimos dos años, sin éxito, lo que hacía presagiar que sería algo espectacular. Y para nada, de hecho ha sido bastante decepcionante, como pasaré a explicar. Para empezar, ya conocía el sitio de dos ocasiones anteriores con el cole se mi hija y con compañeros de trabajo, en días normales (no festivos) y bastante bien. Hoy había un total de 200 comensales, según nos dijeron los camareros. Así que entramos pronto, a las 14:10, porque los niños tenían hambre para que les sirviesen rápido. Hay que decir que los camareros han sido muy simpáticos, rápidos y bastante profesionales a pesar del gran volumen de gente. La primera sorpresa desagradable ha sido cuando, al pedir la carta, nos han dicho que era un menú cerrado, tanto para los niños como para los adultos. Los menús infantiles eran: 1) Arroz a la cubana o macarrones con tomate de primero y tres filetes de lomo con patatas fritas, de segundo. 2) Plato combinado con un filetito de lomo, tres croquetas, tres nuggets y patatas fritas, además de helado de postre. Los dos incluían el agua. Precio (desorbitado para lo que era): 14,50 euros cada uno. Y para los adultos tres entrantes diferentes: sopa de marisco (individual), ensalada templada de chipirones y cherries (nada del otro mundo, comparada con la del Bococo) y un plato de ibéricos surtidos (salchichon, chorizo, jamón y caña de lomo) que, si bien eran abundantes y en general de buena calidad, estaban algo secos (sobre todo la caña de lomo), seguramente porque llevaban demasiado tiempo cortados. Cómo soy alérgico al marisco, muy amablemente me ofrecieron patatas revolconas con torreznos que no eran nada del otro mundo, con algunos trozos de patata y sobre todo frías (vendrían del bar de la entrada). Y de segundo a elegir bacalao, rabo de toro y chuletón. Elegimos estos dos últimos, ambos abundantes aunque el chuletón llegó templado y estaba lleno de grasa y tendones, salvo la parte central. Y para finalizar la (desagradable) sorpresa de ver cómo de postre sólo tenían un vasito (literalmente, dedo y medio) de crema de yogur con helado de limón, lo que para mi mujer ha sido toda una afrenta por ser amante del chocolate. Chimpún. Y de regalo, unas peladillas, dos mini trozos de turrón blando y tres polvorones de Mercadona. Precio del "menú especial": 32 eurazos por cabeza, 96 euros en total por dos menús infantiles y dos de adultos, más dos helados almendrados (Hacendado) extra. He de decir que la comida, aunque abundante (excesiva diría yo porque tuvimos que dejar la mitad), no merece el precio. Por muy poco más vas a sitios como el Bococo donde en cantidad, calidad y variedad, tanto un día normal como un día festivo, no tiene ni comparación. Y para terminar manifestar que he buscado a posteriori en su web y en internet lo del menú y no lo he encontrado en ningún sitio. Debe ser lo típico en Ávila que los lugareños saben porque es costumbre, no porque ni siquiera te lo digan durante las tres llamadas que recibimos en días previos para confirmar la reserva. Si lo llego a saber, no habríamos ido. El año pasado por algo más en Torre Mayorazgo, en Villatoro, comimos de lujo en un entorno espectacular.

27/12/2024: Hoy mismo he comido allí...excelente lugar, muy bien ambientado... Excelente comida, muy buena en cuanto a variedad, calidad y cantidad y precio muy asequible, en menú del día...y lo.mas importante el servicio, su atención y amabilidad ( nos ha atendido Etgar)la rapidez en servir, sin apenas espera entre plato y plato..lleno el comedor...esta muy bien todo...hasta el entorno.le auguro mucho exito..pronto volveré de nuevo.