Chiringuito Tierra Caliente en Vandellòs i l'Hospitalet de l'Infant

Un lugar tranquilo (era martes) donde pudimos disfrutar de una comida riquísima. Nuestra camarera Carmen muy profesional y amable. Reservamos también unas tumbonas allí mismo 👍todo un acierto. La ubicación perfecta. Tendremos que volver para conocer el ambiente de noche.

Comí una paella con mi familia. los camareros y las cocineras súper amables. por no hablar de la dueña Bea súper maja y amable. el ambiente muy bueno es súper bonito. si te quieres der un baño tienes la playa delante.y los cócteles muy buenos en resumen estuve muy cómodo y agusto con este chiringuito que se llama tierra caliente.😀

Un chiringuito excepcional en primera línea de playa! Desde que llegas, te impresiona su ambiente y decoración cuidada, con cómodos sillones, tumbonas y vistas espectaculares al mar. La atención es profesional y cercana, te hacen sentir como en casa. Y qué decir de la cocina… ¡la paella estaba deliciosa, con buen precio y generosa en ración! Ideal para una comida relajada con familia o amigos, volveremos. PD: los boquerones buenísimo.

Muy buen restaurante en la playa, con una vista preciosa y una cocina realmente excelente. El trato es cálido, el servicio profesional y agradable. ¡Lo pasamos genial! Sin embargo, hay un pequeño inconveniente para las familias: no hay menú infantil, así que hay que pedir un plato clásico, que puede salir caro rápidamente. Los cócteles son buenos, pero un poco inferiores a los que ofrecen otros restaurantes de la zona (el mojito un poco demasiado dulce para nuestro gusto). Los precios son un poco elevados, pero la calidad es buena. Un lugar estupendo para darse un capricho junto al mar.

Un rincón mágico, buena cena en la playa

Comimos una paella de marisco y estaba muy buena, la atención excelente también.

¡Hermosa ubicación, excelentes mariscos y baño limpio!

Fuimos 5 chicas a tomar algo. Tuvimos suerte de que aún no había mucho turismo y a pesar de que se acabó llenando llegamos y apenas había nadie. Primero nos sentamos en una mini mesita dentro de la arena. Probamos solo la piña colada y unos refrescos pero el olor de las sardinas a la plancha nos hizo pedir un plato. Exquisitas, muy bien aliñadas y muy frescas. Nos quedamos a cenar de tanto que nos gustaron. Pedimos una paella de marisco, un salmón y varios platos más de sardinas. El trato fue exquisito también. Para repetir

El chiringuito lo tiene todo para triunfar, la decoración, el enclave, mobiliario...pero el servicio es bastante malo, mucho rato de espera, confusión en las cuentas, además de que no es un sitio barato precisamente.

Ubicación perfecta y personal amable. Salomon también fue muy bueno.