Chiringuito Aquí Mismo & Playa Antonio en Rincón de la Victoria

La comida está increíble, situación muy buena, hemos ido varias veces y es nuestro chiringuito favorito, los precios están bien, los camareros no pueden ser más eficientes y amables, pero el motivo de mi reseña es por la desagradable señora de las reservas. Desde Málaga al Rincón de la Victoria cogimos retención de tráfico importante y llegamos 15 minutos tarde. Nos costó aparcar así que nos sentamos y el conductor se quedó buscando aparcamiento. Esto supuso que no pidiésemos la comida hasta 25 minutos después de la hora reservada. Entendemos que es “nuestra culpa” pero esa señora nos presionó diciendo que teníamos la mesa una hora y media, después de eso teníamos que abandonarla. Lo hizo de manera muy poco amable y profesional. Esto nos hizo que comiésemos nerviosos y mirando el reloj. Tuvimos que cancelar uno de los platos porque tardaba demasiado (esto ya no es nuestra culpa pues lo pedimos con una hora de antelación) y nos fuimos con un poco de hambre diez minutos más tarde de lo que ella nos dijo. Nos encanta este chiringuito y seguiremos yendo sin duda pero no nos gustó nada el trato de esa mujer y creemos que debería tener cuidado con la forma en que se dirige a los clientes.

Sitio muy agradable, a pies de playa. Alejandro el camarero que nos atendió ha sido muy educado. Nos ha aconsejado los mejores platos y no a conveniencia del bar, si no segun nuestras preferencias. Le gusta su trabajo y eso se nota! Tiene una energía ejemplar. Volveremos por él :)

Voy todos los veranos a este chiringuito. Alquilo hamaca y pido comida, que he de decir que está muy buena.

Chiringuito en la playa como antaño! Comer con los pies en la arena, espetos jugosos, frituras bien hechas, alioli buenísimo. El servicio muy amable, 100% recomendable

Ayer Cenamos estupendamente, con un servicio muy amable, por lo que hemos decidido volver para comer hoy, pero nuestra sorpresa ha sido, cuando hemos ido a reservar personalmente a las 11:30 de la mañana, y una señora bastante antipática nos ha sido dicho de muy malas maneras que estaba todo reservado y que no tenían ni lista de espera ni nada … un pena… supongo que la mujer tendrá un mal día pero la amabilidad es muy importante para captar nuevos clientes en la hostelería …los camareros son un encanto pero la dueña lo ha estropeado todo

Tipico chiringuito de toda la vida: espetos, pescaito, marisco... Y algún plato fuera de carta como los Tacos locos, riquisimos. Lo único que el servicio, cuando hay mucha gente, es un poco lento y parecido perdido. Se ve que hay varios camareros nuevos, pero no es nada grave, paciencia y comerás muy bien y barato. Hay que reservar con tiempo.

Como clienta frecuente y satisfecha en general, me gustaría hacer una observación con ánimo constructivo. Recientemente pedí una ensalada pipirrana por 10 € (precio que, confiada en previas experiencias, no vi), y la ración fue de aproximadamente 100-150 g de verdura con 2 mejillones (literalmente) de tamaño medio. Creo que el precio resulta excesivo, especialmente al tratarse de una elaboración simple, 2 mejillones y sin ingredientes premium. Entiendo que existen gastos operativos, pero creo que este tipo de detalles pueden decepcionar a clientes que valoran el lugar precisamente por su buena relación calidad/precio habitual. Espero que lo consideren para futuras revisiones. Muchas gracias

Llevo años bajando a este chiringuito, bajadas de un solo día. Es lo que tenemos los domingueros. Qué decir, han ido progresando en el servicio, calidad ya la tenían. Una experiencia genial. Lo recomiendo. En cuánto tenga otro día libre en mi trabajo, aquí me volverán a tener. Por cierto, las hamacas junto al chiringuito y la playa bien.

Esta gente son una maravilla ,espetos buenísimos ,chopitos buenísimos y las conchas finas de diez ,los camareros son muy amables y están constantemente preguntando para que no te falte de nada ,un chiringuito de diez!

Reserve una mesa más temprano el mismo día, para 1 : 30 pm un viernes soleado a finales de marzo. Tranquilo en la terraza cubierta en ese momento, pero todo el restaurante estaba lleno para las 2 : 15 pm. Pedido Rioja y Verdejo vino de nuestro camarero encantador que era muy paciente con nuestro terrible español y se cayó en inglés cuando estábamos realmente luchando! Elegimos verduras tempura, sardinas a la parrilla y porciones de tapa rosada a la parrilla que eran porciones muy generosas. Todo muy fresco y muy bien cocinado. Luego siguieron calamares fritos, que estaban muy frescos con una capa ligera no grasa y papas fritas caseras y más vino. Fue tan refrescante sentarse afuera con una vista abierta del océano y no ser molestado por el humo del cigarrillo, ya que era una terraza para no fumadores. Normalmente tenemos que comer dentro de los restaurantes. Reservamos una mesa para el almuerzo del domingo, allí y luego, con nuestro camarero en nuestra interesante mezcla de ambos idiomas! Me alegro de que lo hicimos, ya que ya había varias reservas para mesas grandes. Fue igual de maravilloso el domingo, donde nos recibieron como amigos perdidos hace mucho tiempo y nos mostraron a la misma mesa encantadora. Croquetas de mermelada, croquetas de langostinos y anchoas deshuesadas fritas adobadas con limón fueron las estrellas para nosotros esta vez en el gran menú, pero todo fue increíble. El lugar estaba absolutamente lleno de lugareños o al menos hispanohablantes, y cualquiera sin una reserva tuvo una larga espera. Muchos aceptaron la espera con bebidas afuera bajo el sol y se sentaron tan pronto como hubo una mesa disponible. No nos apresuramos en absoluto y pasamos una tarde relajada preciosa pidiendo unos platos a la vez a nuestro atento y eficiente camarero. No te pierdas este lugar si estás en la zona. Era nuestro favorito.