Chambao de María en Rincón de la Victoria

Junto al mar. Agradable para pasar un rato relajado

Horas después de haber comido en este singular chiringo, me dieron unos ardores que empecé a golpearme el pecho como King kong. Creo que fue debido al aceite añejo y requemado en el que hicieron las frituras. Curiosamente en ese mismo momento pasó el dueño del selwo y me ofreció trabajo como animador vestido de gorila. Dicho esto ‘’no hay mal que por bien no venga’’.

El lugar es bueno, el servicio es rápido, pero el café, no recomendaría tomarlo aquí. Estaba triste (((( sabor a café instantáneo.

Todo muy rico y bien atendidos.

Puedo decir que dos veces que he estado en familia, la comida muy bien. Sobretodo el pulpo a la plancha. Su personal también estupendo, y por precio calidad seguiré repitiendo cuando de otra ocasión. Gracias y felices fiestas a tod@s.

Son simpáticos, amables, la comida es buena, al igual que el precio.

La comida no estaba mal, fue aceptable, los boquerones fue lo que gusto menos, el sitio es bonito en la misma playa, se puede ver el atardecer muy bonito, aunque no lo recomendaría por el ambiente que se genera entre los camareros, creo q lo que les falla es la gestión, el servicio no fue demasiado bueno, aunque decir también que con nosotros no fueron desagradables en ningún momento.

Es un lugar muy acogedor, las sardina muy buenas, al igual que la paella que es a la leña, los camareros muy simpáticos y muy agradables. Lo recomiendo mucho.

Un lugar muy recomendable para echar el día en familia Hidropedales, Hamacas y una buena comida en la plena playa, los mejores mojitos que he probado nunca

Un lugar muy agradable, con mesas en plena playa y sobre la arena. Es espacioso, se puede hablar tranquilamente y disfrutar del ambiente. Para aparcar hay que alejarse un poco de allí porque no hay aparcamiento alrededor fácilmente.