Casa Pautonia en San Cristóbal de La Laguna

Increíble atendimiento por parte del personal muy cercanos y pendientes de que los comensales estén y coman bien carne fiesta chopitos y pimientos de padrón unos platos increíbles volveremos a repetir sin duda

Vinimos por la nota sin conocerlo de antes y es una maravilla. El trato es magnífico y la comida está súper bien de precio y con raciones grandes y sabrosas. Sin lugar a duda vamos a volver!!!

El local es un gua, tiene 4 mesas para dos y la parte delantera que está llena de los habituales, la comida muy rica pero abundante, le hemos preguntado al camarero y nos ha indicado que si eramos de buen comer pero eso era una barbaridad🤣🤣🤣, no es una queja simplemente para una bandeja pueden comer dos sin problema eso si buenísima, lo que mas.me ha gustado ha sido el pollo fiesta 🤤🤤

Excelente comida típica Canaria. Altamente recomendado.

Deliciosa comida auténtica y servicio amable a precios justos. Lo disfrutamos mucho.

Qué lugar tan acogedor !!!!! Te sientes en la casa con la sazón !!!!! Precios increíbles !!! Personal amoroso !!!! 10/10 !!!

Muchas gracias por el trato tan cariñoso hacen que aunque estés fuera de casa no lo notes. Sitio muy familiar! , Hay que reservar para tener mesa,Parada obligatoria!!!

Vinimos aquí, atraídos por las excelentes críticas y salimos más que satisfechos. Este es un lugar que sirve comida canaria auténtica, deliciosa y verdaderamente casera. Pedimos escaldón, croquetas de plátano, ensalada de tomate y churros de pescado para compartir entre dos. Las porciones eran tan generosas que nos llevamos la mitad a casa para cenar esa noche. El escaldón era algo fuera de este mundo; nunca antes había probado algo así. El pescado frito era fresco y sabroso, y las croquetas de plátano, súper interesantes. No te dejes engañar por la apariencia modesta del lugar; El comedor está al fondo, detrás de la barra. El camarero era encantador, servicial y hablaba algo de inglés. Las tomas complementarias fueron fantásticas y nos pusieron de muy buen humor durante el resto del día. Aunque al final de la comida estábamos tan llenos que apenas podíamos respirar, decidimos compartir un postre: una deliciosa rebanada de tarta de zanahoria que estaba para morirse. Una joya escondida y una experiencia verdaderamente auténtica y única. ¡No te lo pierdas!

Buscamos un pequeño restaurante típico de la zona y que no sea muy caro, y nos aconsejaron venir a almorzar a Casa Boton. No nos decepcionó, cuando llegamos, el gerente nos dirigió directamente a la pequeña sala detrás de la barra con capacidad para un máximo de cuatro mesas. Pudimos probar platos locales y disfrutar de sangría en un vaso de cerveza jajaja. Nos lo pasamos muy bien y lo disfrutamos.

Un buen lugar para comer algo rico. Lo recomendaría 100% a cualquiera. Un buen chico que nos atiende también, lo cual es una gran ventaja. Aunque no hablábamos español, logramos entender cada orden.