CAR•PA TAPAS BAR en Yaiza

La gente era muy, muy amable. Si te sientas fuera, puedes ver el mar a través del callejón. Volvimos por la noche a tomar unas tapas, que en general estaban bien, pero cuando llegó la cuenta, nos quedamos atónitos. Aunque habíamos comido pescado fresco y paella en otros sitios, nunca habíamos pagado tanto como aquí; la relación calidad-precio no nos convenía. También nos cobraron dos veces el pan, aunque solo uno de nosotros lo pidió, y no estaba muy bueno. Pero la gente es amable y divertida.

El bar de tapas es genial. La gente que trabaja allí es muy amable y además nos invitó a unos chupitos por cuenta de la casa. ¡La comida está buenísima y el cocinero es muy amable!

Sabores auténticos y deliciosos. Tomé cerveza y tapas, todo estuvo perfecto.

Buscábamos un sitio con cocina típica de casa y nos decidimos por éste. La verdad que un acierto, atención inmejorable y la comida precio calidad muy buena. Pan de ajo recién hecho, papar arrugadas con mojo, boquerones fritos buena ración y frescos y los churros de pescado toda una sorpresa, rebozado crujiente, nada aceitosos y bien rellenos de pescado. La atención de los camareros muy amables, se nota que tienen buen ambiente de trabajo. Un saludo de un Vasco y una Brasileña. Muito obrigado!!!

Excelente comida. Pedimos para 2, un pimiento relleno, una de rejos de calamar, churros de pescados y papas arrugadas y todo estaba buenísimo. Trato del personal muy bueno. Salimos encantados de allí.

Un pequeño y agradable bar de tapas con un toque auténtico. A una calle del bullicio turístico del paseo marítimo. Menú típico. Los churros de pescado parecían ser su especialidad. El chorizo ​​llegó caliente y las patatas bravas estaban buenísimas. Dos platos de cada uno eran más que suficientes.

¡No solo bueno, sino mejor! Sabores auténticos y caseros, porciones generosas y precios muy justos. El personal es amable y muy atento. ¡Muy recomendable!

Una joya escondida. El dueño es encantador y nos enseñó las tapas y nos explicó cada una. Dijeron que 4 eran suficientes entre los dos. Un delicioso ron con miel de cortesía. Un lugar muy auténtico con un montón de gente local, lo cual siempre es buena señal. Ah, y por cierto, la comida estaba deliciosa.

Una atención maravillosa,tanto del chico gallego como del dueño.

Hemos ido a la hora de comer y nos ha encantado! Buscábamos algo ligero y rápido y nos hemos encontrado con comida casera y un ambiente familiar. Muy recomendado!