Cafeteria La Termica Museo Nacional Energia en Ponferrada

Todo exquisito. Comida riquísima, super amables,lugar muy chulo, buen precio y se aparca sin problema.

Situado junto al Museo de la Energía y al río Sil, a las afueras de Ponferrada. En el interior de una nave rehabilitada. La verdad es que disfrutamos de una maravillosa comida. No sabría que destacar porque todo fue estupendo. La atención de todas y cada una de las personas que dieron el servicio, profesionales y encantadores. Y la comida, a pesar de no tener una carta muy extensa, el detalle y la explicación de los platos, hacen que no sepas que elegir, porque te apetece probarlo todo. Probamos empanada de chorizo y mejillones, menestra de verduras (nada que ver con ninguna que hayas probado), garbanzos con pulpo, solomillo con foie y chipirones. Todo riquísimo y con raciones generosas. A pesar no de poder mas, no pudimos resistirnos al postre, una tarta san marcos rellena de fresas con nata, espectacular y que no tiene nada que ver con la tradicional tarta de toda la vida. Recomiendo reserva ya que no es demasiado grande.

Lugar atípico. Platos de cocina local. Todo para pasar un buen rato. Recomiendo. Tenga en cuenta que el servicio sólo se realiza a la hora del almuerzo y es mejor reservar.

Lugar qué recomiendo y no hay muchos. Me encantó la menestra y la paletilla de cordero con pimientos del Bierzo. Me hubiera gustado que tuvieran un Prieto Picudo monovarietal de la zona. Jesús y su mujer encantadores. La recomendación que me hicieron de utilizar un primer plato y un segundo me encantó. Fue suficiente para nosotros (éramos dos). Volveré a estar con ellos. Gracias, hasta pronto.

Todo perfecto. La comida la hace siempre Suso y la materia prima y la elaboración es de 10. La atención también es muy buena. No es un sitio barato pero merece mucho la pena.

Espectacular restaurante, el chef muy agradable. Los postres son deliciosos: la "tarta de san marcos con fresas y nata", las manzanas asadas con natillas, helado y salsa de frambuesas, la teja con helado y chocolate caliente, el flan cremosisimo y la galleta de avena. Repetiré seguro!!

La comida muy rica, muy buena atención y amabilidad. Destacan por los postres diferentes, especialmente la tarta de San Marcos

Un restaurante muy bueno, la comida increíble pero lo más espectacular desde luego son sus postres. Recomiendo particularmente el flan por su cremosidad y gran sabor, además de la manzana asada.

Fuimos a comer con amigos. El trato inmejorable y la comida muy muy bien. Un sitio estupendo con un ambiente fantástico. De 10.

El sábado pasado tuve el placer de comer en La Central, y qué sorpresa más grata. Un restaurante excelente, con un equipo magnífico que cuida al comensal en todo momento. La carta es espectacular y la cocina… bueno, probablemente de lo mejor de Ponferrada. Ubicado en el Museo de la Energía, este pequeño restaurante está siempre lleno, así que reserva. Pero si no lo haces, espera, porque la experiencia gastronómica merece cada minuto. Empezamos con unas croquetas que eran pura artesanía: caseras, con una bechamel impecable y un rebozado perfecto. Luego, una berenjena que parecía una lasaña – simplemente deliciosa. No nos decidimos por la sugerencia del cocinero (una empanada de chorizo y mejillones, porque ya habíamos desayunado empanada), pero Jesús, el chef, nos trajo un trocito para probar… y qué maravilla. Contra todo pronóstico, ni el chorizo eclipsaba a los mejillones ni viceversa. Una combinación sorprendente y espectacular. El cachopo fue otro acierto: jugoso, sabroso y en una ración más que generosa. Aquí los platos se pueden compartir sin miedo, la cantidad es más que suficiente. La carta es variada, con pescado, verdura y producto local del Bierzo. Y los postres… otra dimensión. Probamos una San Marcos de fresa deliciosa y, como cortesía, un tiramisú con crema que nos dejó sin palabras. El servicio es impecable: atento sin ser invasivo. Y Jesús, el cocinero, es un auténtico artista. La calidad de la materia prima y el equilibrio del equipo hacen que este restaurante sea un éxito asegurado. Si visitas Ponferrada, tienes que ir a La Central. Y si no visitas Ponferrada… tal vez deberías reconsiderarlo, porque esta experiencia gastronómica lo merece. Yo, sin duda, volveré.