Una cata de vinos maravillosa... en un ambiente familiar y no industrializado.
Los dueños son increíblemente amables... muy hospitalarios... su Moscatel es excelente... realmente se nota y se siente la pasión que tienen por su trabajo. Sus viñedos son preciosos... nos dejaron catar las uvas... estaban muy dulces... pasamos unas horas en una compañía maravillosa... Muchísimas gracias de nuevo... la mejor cata que he tenido en España...
Lo recomiendo muchísimo... ¡vayan!