Nos recibieron Julián y Vicky en Bodega La Haya en Los Realejos con una copa de vino de bienvenida. La acogida no pudo ser más calurosa. Visitamos la finca y nos explicaron el trabajo que hacen en las viñas trenzadas, algo muy curioso para nosotros que no habíamos visto antes; después pasamos a la bodega, donde Julián nos explicó detalladamente cómo elabora sus exquisitos caldos. Pudimos descubrir la pasión que siente Julián por sus vinos y la concienzuda y minuciosa forma de elaborarlos. Luego pasamos a degustar una cata de sus vinos, explicados por la enóloga Vicky con extrema profesionalidad y maestría. Por último disfrutamos de un picoteo canario y un extraordinario conejo en salmorejo con papas arrugadas y gofio, todo elaborado por el propio Julián. La comida estaba exquisita pero lo mejor fue el entrañable y familiar momento que compartimos con ambos. Recomiendo encarecidamente la visita a esta pequeña pero espectacular bodega.