Bestia Marina en Garachico

En Garachico, Bestia Marina ofrece una cocina que combina a la perfección la tradición marinera y la creatividad actual. El chef y su equipo trabaja con producto fresco de la isla, siempre a la brasa, para realzar sabores auténticos en propuestas como su original charcutería de pescado o las zamburiñas con parmesano. El ambiente es cuidado y acogedor, el servicio atento, profesoonal y sin ser invasivo, y cada detalle está pensado para que la experiencia sea especial y memorable. Pd: la reinterpretación canaria de la Creme Brulee es exquisita!

La comida excepcional, pescado fresco de primera calidad y muy bien cocinado. El servicio también muy bien con un camarero muy atento y amable. Lo único a mejorar el ambiente, in poco oscuro al estar pintado de azul oscuro y con poca luz. Pasamos un poco de calor. En general muy recomendable, un restaurante de primera que se nota en el precio, pero lo vale.

Algo diferente zmuy bien producto, tratado con mimo y de forma original Atención y consejo excepcional No es barato pero merece la pena

Ha sido una experiencia única de sabores. Cada plato, exquisito y equilibrado. La atención de principio a final, profesional, cordial y amena. Se merencen un 10 Gracias

Toda nuestra experiencia en Bestia Marina fue excepcional. Desde el momento en que entras, te reciben aromas intensos y ahumados; si te gusta la comida ahumada, este lugar es un sueño. La tabla de pescado seco salado fue un comienzo inesperado y maravilloso para nuestro almuerzo: audaz, sorprendente y perfectamente equilibrado. El pulpo con setas shiitake nos cautivó por completo: tierno, rico y lleno de sabor. La crème brûlée distaba mucho de ser clásica: suave, casi caldosa en el mejor sentido de la palabra, con una textura exquisita, cannoli frescos y un toque de azúcar crujiente que le daba un toque sutil. Totalmente inolvidable. Aunque tuve que cambiar mi reserva dos veces, estoy muy contenta de haberlo hecho. El camino a la ciudad por las montañas fue impresionante: una antesala sinuosa y cinematográfica para una de las comidas más memorables que hemos tenido en mucho tiempo.

Fuimos a Bestia Marina desde el Médano. Y sin lugar a dudas volveremos a ir. La comida es una absoluta exquisitez. Toda la cocina es a la brasa y eso, en cada bocado, se nota. El producto es excepcional. El local es precioso, discreto y elegante y el personal fantástico. El chef, una absoluta maravilla, además de encantador. Sabe lo que hace y eso se traslada en sus platos. Recomendado al 100%

Sin duda para mi el mejor restaurante de Garachico. Una materia prima excepcional y una elaboración de primera guardando el sabor del producto local. Todos los platos, sin excepción, muy ricos, nos sorprendió el tartar de atún, las setas locales a la brasa y las zamburiñas. Si tienes oportunidad de degustar un buen pescado local a la brasa o unos carabineros de la Santa no dudes en pedirlos. Nos gusto tanto que fuimos 2 veces en 3 dias.

Hace tiempo que este restaurante nos llamó la atención por su carta, con su cocina muy diferente y lo que más me gusta, con personas con talento de aquí, de Canarias y en Garachico!!. Así que ayer por fin lo probamos. Y no nos defraudó. Extraordinario servicio y extraordinario producto y elaboración. Con una cocina abierta y una barra de mercado con producto del día que nos cautivó. Su pan de masa madre con sobrasada de anchoa! Brutal la tabla de embutidos hecha en la casa: Chorizo de pulpo, pata de albacora, jamón de atún y de pez espada. Un tartar diferente de atún con caldo de kimchi, melón y crujiente con tomate. Unas zamburiñas a la brasa con parmesano y aceite de cilantro. La zamburiña esoectacular! Una cecina de calamar sorprendente. Y un postre de chocolate que fue una delicia. Sin duda recomiendo probarlo.. y sin duda volveremos!!

Excelencia culinaria con excelentes vinos. ¡No te pierdas su charcutería de pescado!

¡Magnífica velada en Bestia Marina! Hace tiempo que teníamos ganas el concepto de mar y brasas de este restaurante situado en uno de los pueblos costeros con más encanto de nuestra isla y ¡qué acierto haberlo hecho! En nuestra primera visita y, con asesoramiento del personal de sala, nos decantamos por probar: - Tartar de atún de aleta amarilla con consomé de kimchi y trucha canaria rellena de sobrasada de anchoas. Un plato fresquito pero con la temperatura justa y la sensación de tener los ingredientes perfectamente equilibrados. - Setas a la brasa. Un plato que nos sorprendió muchísimo, lleno de sabor y delicadeza. - Zamburiñas con vichyssoise de espárragos y Parmigiano. Muy delicadas y con un sabor espectacular. - Cecina de calamar, caldo de carbonara, Parmigiano y foie. Un plato intenso con un sabor espectacular. Y de postre: - Chocolate sexy. ¡Magnífico! La mejor forma de poner el broche final a este primer contacto. Un postre de chocolate con leche a la brasa y tinta de calamar que nos encantó. Disfrutamos muchísimo de cada uno de sus platos. Volveremos para seguir probando el resto de su carta. ¡Enhorabuena!