Bar taperia El talento en Barbate

Fuimos 4 3 adultos y un nene de un añito . Buen trato por los camareros/as y buen servicio super amables , buen comer y a buen precio . Espectacular . Recomendable al cien por cien ,volveremos !!

Buena atención y rapidez en el servicio. 10/10 La comida recién hecha (Caliente) buenos sabores con cantidad generosa, nos faltó poner la foto de la pata de pulpo jeje, nos acordamos cuando ya nos la aviamos comido, por lo menos en la factura la puedes apreciar. Te ponen aceitunas punto a favor. Zona del local tranquila, nada de ruidos, sin duda recomendable al 100% con ganas de volver y probar más platos, fuimos recomendados. Tienen una gran carta de platos ricos.

Excelente experiencia en una escapada a Barbate

Calidad precio excelente el plato de Atún estaba espectacular Recomendable 100%100

Todo estupendo, camareros amables, educados y atentos en todo momento, la comida de 10. Probamos la carrillada, la pata de pulpo y langostinos a la plancha y pulpo frito, tosta de queso con mermelada caramelizada de pimientos, ensaladilla de pulpo, montaditos de calamares etc... Todo muy bueno. Establemiento muy cuidado y limpio. Lo recomiendo, calidad precio muy buena.

Hemos ido a comer con mi equipo de rodaje y ha sido todo genial! Mil gracias!

Fantástico restaurante en el corazón de Barbate!! Señalar la atención por parte de todo el personal y la comida que ha sido muy buena. El equipo del rodaje de "Ella Maldita Alma" han salido todos contentos, es difícil darle de comer a tantas personas en muy poco tiempo y el "TALENTO" lo ha conseguido. Un 10 por ellos, muchísimas gracias Manuel, Nerea, Antonio, Rufo y a los demás que no recuerdo su nombre, perdonarme, sois unos profesionales!!!! Volveremos!! Mil gracias!!!

Los camareros son atentos y bastante eficientes. La comida, exceptuando el croissant de pulpo, nos pareció normal y algo cara, sobretodo los platos que llevan atún traen poca cantidad de este. El plato que nos ofrecieron fuera de carta solo tenían uno, pero no nos lo avisaron así que aunque nos fue ofrecido, la siguiente mesa lo pidió y nos quedamos sin el. Así que mejor advertirlo antes o no ofrecerlo directamente.