Bar Taperia El Gato en Rota

Bar donde se demuestra que lo sencillo siempre triunfa.

Gran descubrimiento , buenas tapas con producto de calidad y a buen precio

Taberna de barrio. Muy concurrida, especialmente antes de comer porque la gente va a tomarse un vino/cerveza y tapas. Tapas con comida de la zona, atún excepcional y tortillitas de camarones buenísimas. Es un sitio sencillo, la comida/bebida se pide en la barra y luego la traen a la mesa en platos de plástico. Las raciones son pequeñas y muy baratas, ideal para picar algo antes de comer o probar un poco de todo. Pertenece a una bodega especializada en la uva de la zona, tintilla, una pena que cuando fuimos el vino se hubiera acabado

Bar de tapeo muy tradicional. La tapas son variadas y ricas. Y los camareros son muy serviciales. Lo malo a reseñar es que en mi opinión, el sitio es bastante cutre. Los platos y cubiertos son de plástico, y los camareros sólo te llevan a la mesa lo que sale caliente de la cocina… las bebidas y tapas frías las tienes que llevar tú mismo.

Es un sitio al que siempre volvemos, la tasca de siempre, sin complicaciones para comer, de todo un poco y todo rico. El queso para comerse un kilo! El arranque roteño, de los mejores que hemos probado, gran variedad de vinos, por supuesto el tintilla de la zona. Para probar los pescados encurtidos... riquísimos. Tienen otros dos establecimientos más en Rota en la zona centro a los que también vamos. Uno de los bares imprescindibles sino para comer, al menos para abrir boca.

Recomendable pasar por el bar si vas a Rota por que si no ni has estado en Rota ni na😂

Taberna de toda la vida ubicada en el barrio del Molino, en Rota. Tiene bastante éxito, así que mejor ir con tiempo si quieres pillar mesa. Ofrecen variedad de vino de la tierra. Excelente relación calidad/precio/cantidad. El trato es amable y cercano. Recomiendo probar el arranque norteño, las papas ali-oli, las tortitas de camarones y las croquetas caseras.

¡Este es mi bar favorito absoluto en España! Gran parte de esto se debe al hecho de que este fue el lugar donde comí y bebí por primera vez en toda España. También fue el lugar donde tomé mi primera Manzanilla. Por $20 puedes llenar tu barriga con bocadillos de chorizo, salpicón y arranque. Esto también incluye varias cervezas para terminar el trabajo. Este lugar es tan auténtico como parece.