Bar PITILLO en Villafranca del Bierzo

Una experiencia muy desagradable Fuimos a este bar durante nuestras vacaciones en Villafranca y la verdad es que no lo recomendaríamos en absoluto. El camarero que nos atendió al principio parecía estar borracho, no se le entendía nada, y para colmo nos trajo mal la comanda: pedimos una cerveza sin alcohol y un mosto, y nos sirvió una cerveza con alcohol y un vino blanco. Menos mal que luego apareció una camarera morena muy amable que supo atendernos correctamente. El ambiente era caótico: gritos constantes, un olor muy desagradable dentro del local y, para rematar, gente fumando dentro a eso de las 23h, algo totalmente inapropiado. Íbamos de paso, pero desde luego no pensamos volver ni lo recomendaríamos. Una pena.