Arya Cocina Mediterránea en Arona

No te dejes asustar por el restaurante Arya Palm-Are. Buena ubicación y una carta interesante: no muy extensa, pero con suficiente variedad. Elegimos el tartar de atún y, como plato principal, un pescado blanco local. Todo estaba delicioso – ¡muy recomendable! El vino fue local, recomendado por el camarero, y fue un acierto. El interior es algo monótono (paredes grises 😕), pero la acogida fue muy cálida. Sin duda, volveremos.

Disfrutamos de la mejor comida de nuestras vidas en Arya. No entendíamos cómo no había cola ni reserva previa. Comida realmente increíble; recomiendo a cualquiera que esté en Tenerife que viaje para disfrutarla.

Un verdadero descubrimiento. Local precioso, comida espectacular y atención impecable. Muy pocos sitios como este restaurante. Volveremos sin duda. Especial mención a Marco el dueño que en todo momento está pendiente de que todo esté perfecto.

Hemos vuelto después de mucho tiempo y espectacular la comida, sobretodo los canelones. Los problemas de servicio y cocina que tuvieron hace unos meses han quedado atrás volviendo a una cocina exquisita y un servicio de 10 marca de la casa. Nos ganaron como clientes desde que lo descubrimos con unos amigos hace un año más o menos. Gracias una vez más

Buen restaurante, comida muy sabrosa y personal super amable. En mi opinión el mejor de la región. El ceviche sabía como en Perú.

Servicio espectacular en el que cuidan cada detalle. Menú degustacion con maridaje vale la pena ya que esta todo muy equilibrado.

Un lugar acogedor y refinado. El personal es sumamente profesional y, a la vez, cálido. El menú ofrece platos que realzan los sabores frescos y auténticos de los ingredientes locales. La carta de vinos está cuidadosamente seleccionada y ofrece una amplia selección de vinos italianos y canarios. Cada detalle, desde la presentación de los platos hasta el servicio, está meticulosamente cuidado, creando una experiencia verdaderamente única. ¡Muy recomendable!

Muy buen acomida y servicio genial. Los precios son muy razonables para la experiencia que se ofrece

Esta emocionante experiencia definitivamente valió la pena, ofreciendo un sueño culinario. El ambiente creó una atmósfera muy acogedora y cálida, mientras escuchábamos música relajante mientras disfrutábamos de la comida. Los camareros fueron extremadamente amables, detallando cada plato según se presentaba, y cuidando de no olvidar nada. Pedimos: - Entrecot de Black Angus deshuesado (de la colección de carnes maduradas en seco) - Pacherri con langosta, tomates cherry y su bisque (para 2 personas) - Sopa de miso con mariscos y algas - Vieiras con crema de trufa y speck crujiente - Una copa de vino Al principio nos sirvieron una rebanada de pan a cada uno y un poco de mantequilla casera de pistacho y miso, ¡que estaba buenísima! ❤️ El Black Angus estaba cocinado a fuego medio, y nos gustó mucho el sabor y el sazón, pero la carne en sí estaba un poco dura. Esa langosta fue lo mejor de la noche, ya que su sabor era increíble: la salsa era un milagro, la langosta estaba cocinada a la perfección (sobre todo las patas) y el pacherri (pasta) estaba increíblemente hecho "al dente". Justo en la entrada había una gran pecera con unas 10 langostas azules esperando a ser devoradas. Sorprendentemente, el camarero nos mostró la que íbamos a comer antes de cocinarla. La sopa de miso estaba muy bien presentada y tenía un delicioso sabor a jengibre y marisco. Normalmente, para mí, las vieiras combinan muy bien con frutas, pero nunca pensamos que combinarían tan bien con el potente sabor a trufa, ya que el speck estaba tan crujiente y delicioso como unas patatas fritas de alta gama. En resumen, fue una experiencia culinaria increíble; nos encantó y sin duda volveremos para disfrutar del menú degustación y del buen ambiente. ☺️😄😃

Las especialidades no eran muy buenas, excepto el pulpo a la galega que estaba bien, los platos de pescado frito se veían bien (no los tomamos) la media ración de albóndiga era una buena ración con 6 bolas y patatas fritas y estaba rica.