Alma Playa en Rincón de la Victoria

Los camareros súper amables y muy respetuosos. La comida muy rica, tanto el arroz como los pescados que hemos pedido. El servicio ha sido lento, pero lo compensan con creces el servicio y la comida . De precio también muy bien .

Buenas vistas y se esta muy bien ! Frente al mar ,atardeceres de golosina de

Bonito restaurante de playa en el paseo. Comida de buena calidad y variedad, servicio amable, sillas cómodas (¡un alivio evitar las duras sillas de madera que suelen encontrar en los chiringuitos!), mucha sombra (o sol si lo prefieres): una experiencia totalmente recomendable.

Lo mejor del sitio es las vistas esta en primera línea de playa y donde hay 3 pistas de pádel pero la comida muy normal

Restaurante en prácticamente la playa, la atencion del personal es muy buena y son muy simpáticos. Fuimos un grupo de amigos. Mejillones y almejas muy buenas, el brioche y los puerros muy buenos. Pedimos dos arroces y fue un acierto. Volveremos. Conviene reservar porque estuvo lleno.

Sin duda un descubrimiento, localización privilegiada junto al mar. Buena música y servicio profesional y atento desde la recepción y en todo momento. A destacar el director del restaurante. Se nota que tiene experiencia, tanto la sala como el personal está muy bien organizado. El domingo hubo muchísimo viento y cambiaron mesas adentro, cerrando carpa. Lo que pudo ser un desastre se solucionó en minutos! Fuimos unos amigos y compartimos unos entrantes muy ricos, mención especial a los arroces de costra que son una delicia. Muy recomendable.

: Fuimos a comer con familia y amigos , en primer lugar agradecer al que parecí ser el encargado que buscase una mesa sin tener reserva teniendo en cuenta que eso restaurante estaba lleno y tenían mucho trabajo. Es un restaurante enfrente de mar con unas muy buenas vistas. El personal en todo momento muy atento y simpático. Las almejas y los mejillones excelentes y los arroces muy sabrosos. Postres muy ricos. Restaurante para recomendar . Conviene reservar . Muchas gracias de antemano . Un abrazo!!

Depende de lo que estés buscando. El restaurante probablemente quiera formar parte de la categoría de alta cocina... pero todavía hay mucho margen de mejora... nos asignaron una mesa a pleno sol después de hacer una reserva con antelación. Pedimos nuestra bebida y pedimos sombra con sombrilla. El personal de servicio se tomó algún tiempo para esto. El gerente del restaurante se acercó a nosotros y nos dijo que esta mesa estaba reservada. Entonces le indicamos que teníamos una reserva y que nos habían asignado este lugar. Habría sido profesional que se dirigiera a la recepcionista para preguntarle sobre la ocupación habitual de la mesa y no dirigirse al huésped. También vino a nuestra mesa cuando un camarero estaba colocando la sombrilla con mucho esfuerzo, les dio instrucciones muy detalladas que no tenían nada que ver con nuestro bienestar, sino con lo que aún le quedaba por hacer en los demás asientos. Durante mucho tiempo no nos fue posible continuar nuestra conversación privada. Eso me parece poco profesional. Cuando llegamos una pareja sin reserva preguntó si podían conseguir una mesa, solo estaban comiendo tas a toda prisa y se marchaban pronto. El restaurante negó la posibilidad de cederle una mesa. Cuando se le preguntó si algo podría estar disponible en el futuro, la respuesta fue negativa. Lo sorprendente es que durante nuestra presencia de 2 horas varias mesas estaban marcadas con carteles de reserva pero no estaban ocupadas. ¡LÁSTIMA!

Estuvimos el año pasado. Nos encantó tanto a mi pareja como a mi. Tuvieron un detallazo de al pedir un arroz (y yo al ser alérgico al marisco) rompieron todo posible contacto de alergia con los utensilio. Lo que pedimos, muy bueno con buena presentación. Sitio recomendable por nuestra experiencia, de hecho, iremos este fin de semana de nuevo. 100% recomendable.

Es penoso que un sitio que pudiera estar bien lo estropee un Señor mayor que con falta,de tacto nos dijo que nos fuéramos para poder reservar una mesa lo cual no nos avisaron cuando nos sentamos a tomar un aperitivo.El joven camarero, mucho más educado nos ofreció otra mesa. Lo peor es que después de estar allí otra media hora. La mesa no se ocupo.