Restaurante Casa de los Gallos en Cifuentes

Excelente restaurante, buena calidad con platos muy bien elaborados, los postres son todos caseros. El trato es insuperable. Sin duda volveremos.

Fuimos un día de diario y estuvimos muy tranquilos , sitio muy acogedor y la comida que pedimos menú, muy rica y es lo que tiene la comida casera hecha al fuego. Un sabía a casa.

La comida deliciosa y muy abundante, nos quedamos con ganas de probar el rabo de toro q se terminó pero pedimos las mejores croquetas de jamón q he comido enucho tiempo y la torrija escandalosamente buena!

Excelente y bonito sitio con una bonita plaza

Era la primera vez que iba y me ha encantado todo, repetiré sin ninguna duda

Restaurante situado en la casa solariega que le da nombre, la decoracion interior antigüa, y en consonancia con la casa. El ambiente es acogedor y el servicio muy atento. Todos los platos, muy buenos, no dejen de probar el bacalao a la parrilla, delicioso, volveré.

La Casa de los Gallos es el mejor modelo conservado en la villa de vivienda propia de los hidalgos o pequeña nobleza rural. Según últimas investigaciones, perteneció a la familia de Fray Diego de Landa y Calderón (Cifuentes 1524-Mérida 1579) autor de "Relación de cosas notables de Yucatán", y obispo de Mérida en Yucatán, familia con la que también emparentaba Diego Ladrón de Guevara Orozco y Calderón (1641-1718) Obispo de Panamá y Virrey del Perú. Destaca su fachada principal organizada en tres cuerpos. Al inferior, construido en sillares, se abren tres puertas adinteladas estando la principal cercada con almohadillado. Las dos plantas o cuerpos superiores ofrecen una singular estructura. En ellos se disponen columnas de orden toscano a modo de pies derechos, sobresaliendo en la segunda planta el espléndido escudo y el pronunciado alero de canecillos tallados, cuya iconografía parece estar inspirada en el mundo precolombino (tucanes, vegetales estilizados...). La inscripción sobre la puerta de la derecha, "LA PURA CONCEPCIÓN DE LA VIRGEN 1655", nos informa sobre la fecha de construcción de la actual vivienda. El nombre popular de "Casa de los Gallos" parece hacer referencia a los que poseía el balcón principal hasta mediados del siglo XX.

La dueña muy simpatica. Servicio rapido y comida excelente

Excepcional. La comida, riquísima..Probamos una tabla de quesos, las migas , el morteruelo y las croquetas. No sabéis decir que estaba más rico.. Volveremos. Es imposible no hacerlo. Calidad precio buena. Muy recomendable