Ventorrillo Del Chato en Cádiz

Hemos comido fenomenal!!! Un restaurante muy bonito y típico. Muy bien aconsejados por el personal!!! Para volver!!!

Tapeando una tarde lo descubrí por casualidad , lo recomiendo todo buenísimo y gran trato

Gran clásico, todo estupendo! Calidad excelente tanto de la comida como del servicio!

Estuvimos hace 20 años, hemos repetido y sigue siendo absolutamente recomendable. Algo que se mantiene con los años e incluso mejora, creo que está todo dicho

Guillermo muy amable y simpático.igual que su compañera El local tiene sorpresa histórica en el bajo. Muy grato recuerdo de Cadiz

Excepcional en todo, comido buena y bien elaborada, lugar muy tranquilo, un servicio agradable y amable, precio muy alto pero muy acorde y proporcionado con lo que ofrecen. Encantado de la experiencia.

Fuimos aquí en un crucero y tuvimos un almuerzo fabuloso. Comimos ensalada de papa, una tortilla de camarones (descrita como un panqueque de camarones, pero era mucho mejor de lo que parece) y lubina. El pan servido con el plato era perfecto. La ensalada de patatas era sencilla pero muy bien hecha y deliciosa. Nuevamente, a pesar del nombre, el panqueque de camarones se parecía más a un pastel de embudo ligero y sabroso con camarones. Aunque normalmente no como pescado, la lubina aquí puede haberme hecho cambiar de opinión. Todo nuestro grupo disfrutó de nuestro almuerzo. Cuando sirvieron la lubina, nuestro grupo se quedó en silencio porque todos estaban disfrutando del plato. Sirvieron su versión de un canolli. Estaba medio relleno de vainilla y la otra mitad de chocolate. Bonito restaurante familiar con muchos recuerdos, especialmente si recorre el sótano que parece utilizarse para celebrar fiestas privadas.

Un sitio con un toque mágico. La comida muy rica.

Sencillamente espectacular, almuerzo para seis personas, todo exquisito y a su tiempo. Servicio a la altura de la cocina. Enhorabuena

Excelente, comida, servicio, ambiente. Las gambas magnificas, un arroz negro de los mejores que he comido y los postres…El bizcocho templado pa enmarcarlo. Una pena que no tenían las cocochas. Deseando volver…en Mayo.