Restaurante La Cocina Abierta en Las Palmas de Gran Canaria

5 estrellas porque aquí no puedo dar más. Deliciosa y auténtica cocina italiana. Pocos platos pero increíblemente elaborados con pasión y materia prima fresca. Fantástica atención al cliente. Una verdadera necesidad de ir.

Si vienes a Las Palmas es IMPRESCINDIBLE cenar en este restaurante. Francesca, una excelente anfitriona, nos explicó de manera exhaustiva todo lo que había en el menú, contándonos historias. Matteo en los fogones hará explotar tus papilas gustativas, ¡cada plato es un placer para el paladar! ¡Por no hablar de los postres! ¡Debes probarlo todo! ¡YO ADORO!

La ensalada de frutas con queso es sublime, muy buena y el equilibrio con las frutas canarias la hace mejor! El vino afrutado también buenísimo!

Simplemente una experiencia gastronómica maravillosa en general. No podemos esperar a volver

El servicio fue excelente y la comida excelente. Recomiendo mucho este restaurante

Excelente restaurante, la señora es muy amable y acogedora. Estábamos de paso y decidimos entrar a este restaurante. Realmente una linda experiencia Estábamos con 4 niños. Y mi hija no quería comer. La señora le hizo un plato especial para ella y así comió Gracias por todo, si volvemos definitivamente pasaré a verte. 🙏🏽

Comida italiana con un toque canario. Deliciosa y platos originales. Además la señora es majísima. Muy recomendado, volveremos!

Restaurante italiano de comida casera, pequeño pero muy cuco.La hacen en el momento por eso tienes que esperar un poquito pero merece la pena, está todo buenísimo. Lo llevan un matrimonio italiano encantador. Adaptan algnos platos los adaptan a restricciones alimentarias. Se me olvidó hacer fotos porque devoramos los platos en cuanto salieron. Los postres, caseros y deliciosos. Super recomendado.

El mejor restaurante de Las Palmas. Comida deliciosa con amor y pasión. Realmente vale la pena intentarlo.

Todo un descubrimiento. Local acogedor con 8 mesitas y la cocina abierta gestionado por un encantador matrimonio italiano muy amables. Y lo mejor de todo: la comida! Cada plato más exquisito que el anterior. Y eso se sabe al ver también a los demás comensales devorar sus apetitosos platos en tiempo récord. Ambiente muy agradable. Repetiremos sin duda. Y encima bien de precio: 55 euros x gazpacho de aguacate, souffle de calabaza con crema de queso y trufa, ossobuco impresionante, tarta de chocolate negro, mousse de gofio y bebidas. Gracias a Francesca y Matteo