Nakashita en Barcelona

Está bueno, muy bueno la verdad, pero no tan bueno como el precio, rondan entre 50-60€ y 80-100€, por persona, si haces vinos y postres y, en ese rango hay opciones mucho mejores.

¡Taberna tradicional de fusión brasileño-japonesa! Este restaurante fue una excelente elección. Reservad en la barra, fue una experiencia increíble ver como preparan los platos en directo. Los uramakis nos encantaron, el Sake Nakashita una pasada y el uramaki especial Nakashita nos gustó tanto que lo repetimos. Si os apetece wagyu también tienen algunos platos, nosotros probamos el Yakimeshi de wagyu.

Buena calidad pero platos pequeños, la presentación no es muy buena. Servicio lento y dentro había un olor terrible a comida frita. Por suerte había sitio afuera.

El sushi estaba buenísimo. El servicio regular. A pesar de que pone en un cartel que aceptan Endered ticket restaurante, realmente no lo aceptan. Además, nos hicieron irnos antes de tiempo porque tenian una reserva para esa mesa. Una lástima porque la comida era buena.

Gran experiencia, gran comida, servicio perfecto.

Uno de mis restaurante preferidos de BCN!!! Un placer cada vez que voy! 🫶🏽

Comimos nigiris y gucan, buenisimo todo, sin muchas salsas ni aderezos que a veces estropean el producto. Tienen barra y puedes ver como te preparan el sushi al momento. Repetiremos

¡¡¡Recomiendo mucho este lugar!!! Miguel es un gran chef, escucha tus preferencias y recomendará platos tan increíbles. Miguel hace que este restaurante sea especial y seguiré contándoles a mis amigos sobre él. Un pescado tan fresco y una joya escondida en Barcelona. ¡¡¡Me gusta aquí!!!

La comida bien, pero en general más pretencioso de lo que es, hay que reconocer que se libra por la comida, estaba todo bueno, pero el servicio es algo imperdonable, si eres mínimante exigente o quieres un servicio en condiciones, es algo que deben cuidar más, no voy a remarcar si fue camarero o camarera, pero po ese a bailar en medio del servicio y del local, que ya es pequeño ( no es algo que importe porque es acogedor ) pero no es digno, y tampoco voy a entrar en la simpatía de la persona, pero con decir que se precipitada demasiado en recoger la mesa con decir que me retiraron todo lo de la mesa cuando mi acompañante no había acabado ni de comer, vamos que no me dejaron ni la servilleta, apenas acababa de comer ya me retiraban el plato, aun estábamos masticando, ni preguntaron si queremos algo más o postre, y apuntar que ni era tarde ni había mesas esperando, total un despropósito de servicio, y hablo como ex trabajador de hostelería, y actualmente empresario.

¡Tuvimos una comida deliciosa aquí servida por Giselle y el personal de cocina! Gyoza, deliciosos panecillos y ramen. ¡Fabuloso! ¡Un pequeño gran restaurante en un gran vecindario!