Marisqueria Alfredo en Castro-Urdiales

Cenamos allí por la tarde. Servicio no particularmente. Deberíamos llevar nuestros propios platos a las mesas sucias. Ensalada de pulpo flotando en aceite, no muy sabrosa, pero 22 euros la ración. ¡No, gracias!

Lo bueno es a media mañana pedir unas rabas o alguna ración de lo que hay en barra (todo rico) y salir fuera a las escaleras a tomar un poco el sol

Buen genero, no pudimos probar nada caliente ya que la cocina estaba cerrada.

Buenas comida pero no había sombra en la terraza

Sitio concurrido, obligatoria parada para hacer unos pinchos y unas tapas… todo fresquisimo y apetecible al ver esa barra a rebosar de pescado y comida buena. Si vas de terraza tienes que pedir dentro y sacar tu la comida pero los camareros son amables.

Sito inmejorable por su ubicación, servicio rapido pero muy caotico en su horas punta de servicio, pero valdrá la pena. Recomiendo las rabas.

Siempre que venimos a Castro Urdiales tenemos que hacer una parada aquí y pedir unas buenas rabas y anchoas en vinagre, es un placer poder disfrutar del sitio y la comida!

Genial. Súper rápidos y atentos. El sitio es precioso y se está genial, hay unas vistas preciosas. La comida muy rica, se nota la calidad. El pulpo está increíble, riquísimo. Hay mucha variedad de tapas y raciones y todo tiene una pinta riquísima, y las que hemos probado muy buenas. Súper bien, lo recomiendo mucho.

Como siempre, buen producto en pescados y mariscos y una carta de picoteo amplia. Situacion privilegiada de cara al puerto. Todos los camareros muy atentos, Flavio, Aaron, Miguel, Juanpa,..

Si quieres sentarte en una mesa debes reservar, cuando llegamos estaba repleto y eso que nuestra reserva era a las 15:00. Nos costó un poquito llegar hasta la barra y decir que teníamos reserva para comer. Pedimos mesa en el interior y la verdad que es muy pequeño y como hay muchas gente pidiendo en la barra resulta peli agobiante. La comida muy rica con elaboraciones sencillas de productos de muy buena calidad. Una vez que te toman nota va todo sobre ruedas y están súper atentos al ritmo de la mesa, sin olvidarte ni agobiar para que termines pronto. Eso es algo muy positivo ya que fácilmente podrían llenar las mesas más veces por comida. Para 3 personas compartimos ración de zamburiñas, ración de navajas y chopitos de entrantes, todo muy fresco y lleno de sabor. De segundo rodaballo a la plancha también muy fresco y co el punto de cocción perfecto. De postre tarta de queso al horno muy rica. El precio es alto pero en línea con los altos precios que ahora hay en el mercado para mariscos y pescados, no puedes pretender comer rodaballo salvaje y no pagarlo!