Feliciano Garcia Sanchez en Santa Pola

Todo muy bueno, el servicio muy bueno. Las raciones un poco escasas

Muy buena calidad, muy buen precio y buenísima la atención. Estupendo para repetir

El restaurante para hacerte un menú precio calidad está muy bien, y en verano no he estado pero tiene muy buena pinta con la piscina de estar bien y es ideal para niños.

Menús espectaculares calidad-precio. Trato estupendo. Recomendadísimo.

Ha mejorado con los años, comida casera a un precio razonable, mantiene la esencia de estos últimos 15 años. El ambiente es para familias, tiene zona de niños en la zona cubierta climatizada de la piscina. El servicio muy bueno, camareros profesionales, con un trato familiar y alguno de ellos "de toda la vida". Hemos pasado de dejar de venir a ser la primera opción para comer a diario. Ha sido una alegría volver a comer bien en este restaurante.

Un restaurante perfecto en cuanto a calidad-precio, por poco se come bien. Es un local muy acogedor y familiar, pero sobre todo tranquilo, transmite sensación de calma. Una vez alguien dijo que a veces la sencillez es lo mejor, y este es un claro ejemplo. Tiene 2 "terrazas" (1 donde la piscina y otra en la calle) y también parte interior, en cualquier lugar de esta bien. Servicio muy bueno y agradable. Un restaurante de 4 estrellas y genial calidad precio.

Buen restaurante para celebraciones y además con piscina

Trato familiar, ambiente tranquilo y comida estupenda

Aquí obtienes un par de menús fijos; normalmente uno más bajo/otro más alto en precio. Teníamos un menú para dos, que comenzaba con queso frío, jamón y salami. El queso estaba en rodajas duras, el jamón y el salami no estaban demasiado picantes. Lo acompañaban con una especie de pan tostado y una pasta de tomate. Además de eso, había pequeños pescados blancos fritos, con cabezas y espinas; podrías comerlos enteros si quisieras. Después de esto todo se volvió un poco confuso; La señora que originalmente tomó nuestro pedido fue reemplazada por un hombre que nos ofreció postres. Como yo no hablo español, dejé que mi compañero le dijera que estábamos en el otro menú. Luego llegó una paella, hecha con fideos en lugar de arroz; tenía un par de gambas y mejillones. La comida estaba toda fresca, la paella estaba demasiado rica en ese momento. El pan y el agua se encargaron de eso, con una fina rebanada de tarta de queso cada uno, como postre. Aparte de la confusión, fue una comida agradable; aunque el camarero sí me seguía diciendo el mismo 'Buena'. Por cortesía, no es un lugar para tomar fotos.

El menú muy poca cantidad de comida pero de calidad