azaya en El Boalo

Todo bien, excepto la ubicación de la mesa. Con más de 15 días de adelanto en la reserva no te pueden decir que el que antes llega le dan la mejor mesa. Es decir, y según esa teoría, si yo reservo el día de antes y me presento a las 13:00 horas, me dan junto al mirador. Dudosa forma gestionarlo, sin duda.

Señero y meritorio establecimiento situado a los pies de La Maliciosa, con apabullantes vistas y un muy cuidado ambiente. Iniciamos las hostilidades compartiendo una ensalada de corujas (excelentes de frescura) y un guiso de manos y morros de ternera (de sobresaliente salsa y trabazón); para acometer, a continuación, los calamares en su tinta (excelentes sin ambages) y los garbanzos guisados con langostinos (perfecta la cocción y sabor a marisco). Maridamos estas viandas con el vino elaborado y "mimado" por Pedro (alma del establecimiento). Se trata de "Arnach", garnacha de Cebreros, rojo picota con ribetes violáceos, poco astringente, de contenida acidez y lágrimas glicericas; en la retronasal frutos maduros y leve toque final de regaliz negro. Extraordinario caldo que resume tanto el cuidado y sensibilidad del local, como la empatia y tesón de sus directores y equipo. Mención especial al servicio por su profesionalidad y magnífica praxis que conforman, sin la menor duda, un equipo bien engrasado. Si duda, se hace obligatoria y meritoria una segunda visita.

Un lugar precioso para comer o cenar, sobre todo por las vistas que tiene de la Sierra de Guadarrama. La comida de una calidad exquisita y con una presentación cuidada al detalle. No tardan nada entre plato y plato. El atún, los calamares en su tinta y la tarta de chocolate, espectaculares.Volveremos!

Excepcional, sin más, en todos los aspectos. Pero como todo es mejorable, quizás intentaría renovar un poco la decoración.

El sitio es genial, las vistas preciosas. La comida exquisita. Nos atendió Liz que es una chica majísima y muy agradable. Súper recomendable

Buena comida, servicio y entorno

Maravilloso como siempre un placer comer en el Azaya

Lugar precioso con vistas increíbles. El servicio inmejorable..no es barato pero merece la pena por la calidad de los productos y el lugar.

Además de la comida , lo mejor la atención de Liz. Profesional , atenta y muy amable.

Pues como cada año voy a Azaya a celebrar Navidad o Año Nuevo. Este año ha tocado Año Nuevo . Todo genial. Son una gente estupenda , unos grandes profesionales. Da gusto ir . Hemos comido en el segundo turno y todo genial. Normal q en estos días hagan dos turnos . La comida toda maravillosa, ni una sola pega . Las croquetas de 10. La carne de vacuno espectacular. Hasta pronto .